
El alcalde anunció mesas de trabajo con autoridades regionales para revisar la controvertida medida que afecta a vehículos no matriculados en Bogotá.
El alcalde Carlos Fernando Galán anunció que la próxima semana instalará mesas de diálogo con mandatarios del área metropolitana y otros actores relevantes, con el objetivo de revisar los cambios al pico y placa que afectan a los vehículos no matriculados en Bogotá. La medida ha generado una fuerte controversia desde su presentación.
El debate se intensificó luego de que varios alcaldes expresaran su inconformidad con la restricción. El gobernador de Cundinamarca, Jorge Emilio Rey, manifestó su desacuerdo al asegurar que la decisión “tomó por sorpresa” a la administración departamental, pues —según dijo— no fue socializada ni discutida previamente.
Rey también cuestionó el fundamento técnico de la medida, calificándola de discriminatoria y basada en un análisis “superficial” de las cifras de movilidad. Además, defendió la legalidad de los incentivos tributarios que ofrece Cundinamarca para la matriculación de vehículos y señaló que estos beneficios no explican la reducción del recaudo en Bogotá.
Galán, por su parte, insistió en la necesidad de fortalecer la relación entre Bogotá, el departamento y la nación, recordando que la capital no puede actuar de manera aislada. Enfatizó que las decisiones deben tomarse bajo principios de corresponsabilidad y equidad entre las regiones.
El mandatario reveló que cerca del 80 % de las personas que han adquirido vehículo en Bogotá durante las últimas dos semanas manifestaron su intención de matricularlos dentro de la ciudad. En ese sentido, recordó que la restricción busca que quienes usan las vías del Distrito contribuyan de forma adecuada al mantenimiento de la infraestructura.
De acuerdo con cifras de la Secretaría de Movilidad, alrededor de 170.000 de los 546.000 vehículos que circulan diariamente por Bogotá están registrados fuera de la capital, lo que representa una pérdida acumulada de 1,1 billones de pesos desde 2012. La nueva normativa, que entrará en vigencia el 1.º de enero de 2026, contempla restricciones dos sábados al mes y un cobro 50 % más alto para los vehículos no matriculados en Bogotá.
Foto: La FM
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